Por ahora, Internet es el paraíso de la información pero
pronto lo será también del comercio. Para los empresarios, la
posibilidad de vender sus productos en todo el mundo, sin necesidad de tiendas,
expositores ni personal, resulta tremendamente atractiva.
Para el
usuario queda la ventaja de comprar desde casa, conocer de un vistazo el saldo
bancario o la selección de los últimos discos que han salido al
mercado. Y todo a mejor precio. Sin duda, esto producirá un importante
movimiento empresarial.
Con inversiones relativamente pequeñas,
aparecerán numerosos competidores a la caza del nuevo mercado. Juan
Carlos Llorente, director de Internet y Herramientas de Desarrollo de Microsoft,
anunciaba un nuevo producto que permitirá que cualquiera cree su propio
negocio en la red por menos de medio millón de pesetas y que se puede
gestionar sin salir de casa, informa Alberto de las Fuentes.
Todos
estos avances, impensables hace un año, también presentan
problemas específicos. Uno sobre el que se ha hablado abundantemente en
los últimos tiempos es el de la seguridad. En estas jornadas
profesionales del SIMO96 se han adelantado soluciones que permiten ser
optimistas de cara al futuro: el nuevo protocolo SET (siglas en inglés de
Seguridad en las Transacciones Electrónicas) se convertirá en el
lenguaje informático estándar para el comercio en Internet. Está
apoyado por todos los grandes del sector, como Microsoft, Netscape, IBM, Visa,
Mastercard, etc. y terminará con muchas de las preocupaciones sobre el
uso de datos de las tarjetas de crédito.
¿Quiere Abrir un Comercio en la Red?
La posibilidad de comprar y vender productos a través
de Internet va a revolucionar el mundo de los negocios
Por Alberto de las Fuentes
Internet es ya el paraíso de la información. Y como ha podido
verse en este Simo '96, pronto será también el del comercio. Por
un motivo: Internet tiene innumerables ventajas para las empresas.
Para
empezar, no hace falta un espacio físico, no es necesario pagar
alquileres, ni mobiliario, y apenas se necesitan empleados. Además, no
hay que contar con intermediarios y los gastos de distribución y de
almacenamiento son mucho menores
Estas parecen ventajas más que
suficientes para pensar que efectivamente se va a producir un gran cambio en la
forma de hacer negocios tal y como la conocemos hoy en día. Pero lo mejor
de todo, lo más trascendental, es que cualquiera puede montar su empresa
en el ciberespacio .
Esto, que parece muy complicado, no lo es tanto.
Claro que para ganar dinero, especialmente en un medio nuevo como es Internet,
existen numerosos interrogantes que deben ser resueltos. Además de tener
algo para vender.
¿Qué se necesita para tener éxito en la Red?
Un mercado apetecible.
Lo primero que necesita una empresa para ser rentable es contar con un
mercado potencial, un público al que dirigir sus productos. Aunque
Internet es un fenómeno relativamente nuevo, existe ya un público
amplio y en constante crecimiento. De momento, sólo un 2% de la población
española está conectada a Internet.
Pero esto es más
gente de lo que parece. Y quienes utilizan ordenadores, en casa o en el trabajo,
suelen tener un cierto nivel cultural y un poder adquisitivo alto. Buena parte
de ellos son profesionales que, generalmente, disponen de poco tiempo para hacer
compras al estilo tradicional.
Además, Internet se está
popularizando rápidamente. Los precios, tanto de los ordenadores como de
las conexiones, han bajado mucho y lo seguirán haciendo en el futuro. Y
navegar por la Red, aunque todavía requiere algo de práctica, cada
vez es más fácil, como han podido comprobar muchos miles de
visitantes de este Simo '96.
Esto no quiere decir que todo el mundo
vaya a engancharse inmediatamente, pero el público existe ya y además
va a crecer muy rápidamente. O sea, que ya hay gente a la que vender.
¿Cómo se paga?
Sin duda, uno de los mayores tópicos al hablar del comercio en
Internet es el de la inseguridad. Se dice que nadie se atreverá a pagar
con su tarjeta de crédito porque los crackers o piratas informáticos
pueden robar esta nformación y utilizarla de forma ilícita .
Pero
esto, literalmente, ya es historia. Una de las grandes novedades del Simo, que
ha pasado relativamente inadvertida para los medios de comunicación, ha
sido la presentación del sistema de pagos por tarjeta de crédito
SET (siglas en inglés de Seguridad en las Transacciones Electrónicas).
Mediante
un doble mecanismo de encriptación (claves), se pueden hacer negocios a
tres bandas (usuario, banco y comercio) con total seguridad. El sistema cuenta
con el apoyo de Visa, Mastercard, Microsoft, IBM y muchos otros. Y es totalmente
fiable. Tanto que, en el caso de que alguien pudiera descifrarlo (no está
claro que pueda hacerse), necesitaría la potencia de cientos de
ordenadores y le resultaría mucho más caro que el posible
beneficio que pudiera sacar.
La tienda virtual.
Pero no basta con tener un público y un sistema de pago para vender
nuestros productos. Además, hace falta tener un lugar para exponerlos y
que la gente se pueda interesar por ellos. ¿Y cómo se hace esto en
Internet? Parece terriblemente difícil, pero en realidad resulta ya de lo
más sencillo.
Aunque no ha sido presentado en el Simo, Microsoft
ha lanzado en Estados Unidos, hace apenas diez días, el Merchant Server.
En España ya está disponible, aunque su puesta de largo oficial se
va a demorar algunas semanas.
Se trata de un producto informático
relativamente sencillo que permite crear tiendas en Internet. Y no una sino
muchas, a semejanza de una galería comercial o unos grandes almacenes. El
usuario visita los stands y selecciona lo que le interesa, desde cuadros hasta
calcetines o libros, incluso la compra de la semana. Luego lo carga a su tarjeta
de crédito y en unos días o unas horas lo recibe cómodamente
en su casa.
500.000 pesetas.
Una gran ventaja del Merchant es su flexibilidad: puede adaptarse a
empresas de cualquier tamaño. Lo único que se necesita es una base
de datos y un servidor de Internet para salir al ciberespacio. La base de datos
podrá ser la de la propia empresa y alquilar espacio en un servidor
externo (y hay muchos) no resulta excesivamente caro.
En palabras de
Juan Carlos Llorente, director de Internet y Herramientas de Desarrollo de
Microsoft, el objetivo declarado de su compañía es "que
cualquiera pueda poner su empresa en Internet por menos de medio millón
de pesetas y, además, que la pueda gestionar desde su casa".
Y
pronto aparecerán otros productos. IBM ha presentado en el Simo el NET
Commerce, que todavía está en versión Beta (lo que
significa que aún se encuentra en fase de pruebas y necesita mejorar su
presentación y contenidos). Pero el objetivo es el mismo: poder vender
cualquier cosa imaginable a través de Internet.
Previsiblemente,
esta posibilidad de montar un negocio de manera fácil y con una inversión
tan pequeña, va a hacer que mucha gente se lance a crear su propia
empresa: el riesgo no es muy grande y la posibilidad de hacer dinero es real.
Además, al existir muy pocos gastos, se podrán ofrecer todo tipo
de productos a precios muy competitivos, lo que dinamitará la oferta.
Casi de repente, la competencia va a ser atroz.
Esto hará que
muchas de las empresas actuales no sean capaces de adaptarse a tiempo. Además,
la competencia no será sólo española. Con Internet no
existen fronteras. Cualquier empresa del mundo puede alcanzar a los consumidores
españoles y viceversa (esto es particularmente cierto para las empresas
europeas).
Sectores enteros de la economía pueden caerse y otros
nuevos van a aparecer.
Campos como el del turismo, la venta de pasajes
de avión, de libros, de discos compactos y muchos otros van a verse
afectados en muy poco tiempo. Y, a la vez, surgirán nuevas oportunidades
de negocio para quienes estén atentos.
Hay varias grandes
empresas que, sin hacer ruido, llevan tiempo trabajando sus productos de
comercio electrónico (antes de un mes, asistiremos a un buen número
de presentaciones). Así que no hablamos del futuro. La revolución
comercial ha empezado.
Qué necesita para vender en Internet
Lo primero que hace falta para vender en Internet es tener un producto.
Sirve casi cualquiera que se le ocurra y puede ser físico o no (lo
mismo da jerseys que seguros para el coche).
Además, necesita un
ordenador con una base de datos, donde registrar su lista de clientes, los
pedidos que le hacen, los productos que tiene en stock, los precios, etcétera.
Cualquier empresa cuenta hoy con una base de datos.
Necesita una
licencia para usar un programa como NET Commerce de IBM o Merchant Server de
Microsoft (aparecerán más). El programa completo cuesta sobre
1.925.000 pesetas más unas 450.000 por cada empresa que lo utilice.
Pero
no necesita comprar el programa entero (sería como comprar todo un
centro comercial), sino que le basta con alquilar una tienda virtual de un
tercero. IBM aún no tiene precios.
También hace falta un
servidor de Internet. La opción más sencilla y barata si usted
quiere vender productos en Internet es alquilar espacio a alguien que ya tenga
un servidor. De esto se tendrá que ocupar quien compre el programa
completo y no debería resultar excesivamente caro.
Un buen
lugar para situar su tienda. Como en el mundo real, hay lugares en Internet que
son muy concurridos y otros por donde no pasa nadie. Lo mejor es estar situado
en algún lugar con mucho tráfico. Esto puede ser un proveedor de
contenido, como un periódico, o un centro comercial virtual con un nombre
reconocido.